Fútbol Argentino

Pese a la derrota, el reconocimiento que recibió De Paul de Atlético Madrid

El volante derecho argentino es número puesto para Diego Simeone en el equipo español.

Por Roberto Tapia

El volante derecho argentino es número puesto para Diego Simeone en el equipo español.
El volante derecho argentino es número puesto para Diego Simeone en el equipo español.
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Por varios cuerpos de distancia, el volante derecho diestro Rodrigo De Paul es uno de los referentes de la Selección Argentina campeona del mundo y del continente sudamericano con total justicia. Y eso está reflejado en los partidos importantes cuando se pone el equipo al hombro y se pelea contra todos saltando por sus compañeros ante una injusticia si así se presenta.

El presente del ex Racing Club en Atlético Madrid es más que auspicioso porque Diego Simeone lo coloca en la franja derecha del mediocampo y rinde frutos cada partido que le toca jugar, a veces con más o menos aciertos. Pero como es un futbolista cumplidor, las metas las va aprobando y las marcas redondas van apareciendo solas con el correr de los duelos y del tiempo básicamente. Y ante Barcelona, el ex capitán de Udinese logró una muy importante a nivel personal que tiene que ver con el sentido de pertenencia.


El volante llegó al conjunto Colchonero a mitad de 2021 y se convirtió en fundamental con el paso del tiempo. Tanto es así, que en la derrota de la semana pasada ante Barcelona por 1 a 0 cumplió 100 partidos en la primera del club capitalino. Y eso se vio reflejado en un reconocimiento que le realizó el club español al siguiente encuentro.

El premio que le dieron a de Paul el fin de semana pasado

En ocasión del choque ante Almería que su equipo ganó 2-1 y en el que fue reemplazado por su compañero y mediocampista histórico Saúl Ñíguez, el presidente del club Enrique Cerezo le entregó una placa conmemorativa por llegar a esa cifra. En sus 101 presencias, De Paul convirtió siete goles y brindó 12 asistencias. Estas estadísticas demuestran que, pese a la falta de títulos colectivos, su estadía dentro del campo de juego es clave para la moral del equipo y sus colegas que van por el mismo objetivo que él: levantar la UEFA Champions League por primera vez en la historia.


 


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