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Ganó tres Copas Libertadores en Boca, ahora hizo una cruda confesión y conmueve

Esta leyenda del club xeneize impactó a todos con la confesión que realizó sobre sus inicios.

Por Roberto Tapia

Esta leyenda del club xeneize impactó a todos con la confesión que realizó sobre sus inicios.
Esta leyenda del club xeneize impactó a todos con la confesión que realizó sobre sus inicios.
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El fútbol muchas veces sirve como un puente para jóvenes que han atravesado una situación complicada en su infancia y logran salir adelante. Es el caso de este futbolista que se convirtió en uno de los grandes futbolistas de Boca Juniors, llegando a ganar tres Copas Libertadores bajo las órdenes de Carlos Bianchi (2000, 2001 y 2003).

Antonio ‘Chipi’ Barijho es uno de esos futbolistas que llegó a cumplir sus sueños de la mano de Boca Juniors. Surgido en las divisiones inferiores de Huracán, el ‘ChipiBarijho llegó a Brandsen 805 en 1998 y junto al ‘Virrey’, además de las conquistas continentales, alcanzó la gloria mundial en dos oportunidades (2000 y 2003).

Recientemente, Barijho habló con El Canal de Boca refiriéndose a su infancia y el impacto que tuvo el Xeneize en su vida: “Yo toqué fondo de chiquito. La pasé mal, por eso todo lo que vino es muy bueno para mí, sea mínimo o grande. Disfruto al máximo. Gano en una comida, un entrenamiento, una charla. Por más que digan que perdí, yo pienso que gané. Capitalizo todo lo bueno. Una charla con algún jugador de Primera, un juvenil, uno de infantiles, un kinesiólogo, un utilero, un cocinero... Siempre gano”.

“De chico estaba enfocado en lograr cosas, crecer, cumplir sueños. Tuve muchas oportunidades de irme de Boca cuando ganamos todo, pero a los dirigentes les decía que me quería quedar. No me importaba lo económico. Cuando venís de la villa, de pasarla mal, no mirás lo económico, mirás lo sentimental. Y eso era Boca para mí. Yo pude cumplir todos los sueños que me propuse”, agregó.

 

Su mensaje a los jóvenes

En la actualidad, Barijho es entrenador en las formativas del Xeneize y usa su experiencia de vida para incentivar a los juveniles: “A los chicos que viven en la villa les digo que todo se puede lograr con esfuerzo y sacrificio. Hay que poner mucho de uno y después la vida te lo recompensa. Yo dormí muchos años en el piso, no tenía para comer, para dormir ni para vestirme. Lloré, sufrí mucho. A veces a los chicos los ves muy mal y piensan que solamente a ellos les ha pasado”.


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