Por Roberto Tapia
Boca Juniors derrotó por 1 a 0 su par de Newell’s Old Boys por la jornada 13 de la Copa de la Liga Profesional en el segundo duelo luego de la caída en la final de la Copa Libertadores el fin de semana anterior en Brasil, el primero como anfitrión en La Bombonera y con todo el público a su favor. Sin embargo, apuntando a la próxima edición del torneo sudamericano más importante, el Xeneize debe ganar lo que queda para llegar al famoso cuarto lugar de la tabla anual.
A seis unidades de dicha posición, la última contienda es en Mendoza frente a Godoy Cruz, uno de los que hoy está entrando de forma directa a la mencionada competición. Por lo tanto, dicho compromiso más el de las semifinales de Copa Argentina frente a Estudiantes del 22 del mes en curso se volvieron claves para las aspiraciones auriazules. Ya con el DT provisorio Mariano Herrón como líder fuera de la línea de cal, su misión es poner a Boca en el barco rumbo a la séptima conquista continental otra vez y volver a obtener la gloria eterna fuera de su país.
El penal que cambió por gol el delantero uruguayo Miguel Merentiel derivó en el grito sagrado número 15 en el año, justo en el día después que el combinado auriazul haya decidido ejecutar la cláusula de compra de tres millones de dólares por el 100 por ciento del pase a Palmeiras. Esto significa que el equipo porteño lo disfrutará por los próximos tres años sin discusión y sigue siendo determinante a la hora de rematar al arco rival.
En charla con la transmisión oficial del partido frente a la Lepra, el autor del gol del triunfo reveló lo siguiente: “Si, pedí el penal, Pipa me preguntó si quería patear, le dije que sí y le agradezco por darme el espacio. Contento por el triunfo por la gente que se lo merece, nos acompañaron en este momento difícil”.
29/02/2024
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